Un poco de naturaleza se adentra en los hogares y rompe con las líneas rectas, rígidas y tradicionales, generando un espacio acogedor donde recostarse y descansar.
Un caos ordenado de piezas de madera se transforma a la vez en un mueble simétrico y asimétrico.
Con su idea de combinar tecnología, forma y función, y el objetivo de mejorar la vida diaria, el diseñador sueco Markus Johansson quiso crear una pieza que rompiera con los tradicionales diseños de muebles y así poder encontrar un nuevo lenguaje para el diseño.
Haciendo uso de antiguas y nuevas tecnologías, la silla se ha hecho a partir de piezas curvas de madera, y de sección circular, sin ángulos rectos. Éstas son dobladas y luego perforadas en la CNC para lograr un ajuste exacto. Todas las piezas más gruesas son idénticas y cortadas con distintos largos para hacer más fácil el armado.
Este lúdico y original proceso da como resultado un elemento funcional que combina tecnologías y respeto por el medioambiente, además de otorgar a los espacios un elemento de forma orgánica que permite adoptar diversas posiciones de descanso.